Consejos para ahorrar energía en australia
Ajuste la temperatura de su frigorífico a 4-5 grados y la de su congelador entre -15 y -18 grados centígrados. Mantén los frigoríficos y congeladores en un lugar fresco y bien ventilado, lejos del horno y del sol, para ahorrar electricidad. Deja un espacio de cinco centímetros alrededor del frigorífico para que el aire circule libremente.
Siempre que sea posible, utiliza un tendedero en lugar de una secadora. Utilice la secadora sólo con la ropa llena y bien escurrida. La ropa nunca debe introducirse en la secadora empapada. Mantenga limpio el filtro de pelusas.
¿Cuáles son las 3 formas de almacenar energía?
Los sistemas de almacenamiento de energía más comunes son las baterías eléctricas, las baterías térmicas y los almacenes térmicos.
¿Por qué debemos ahorrar electricidad?
Cuando limitas tu consumo de energía, reduces tu impacto en el medio ambiente. Cuanto más tiempo pasemos sin hacer cambios significativos, mayor será la amenaza del calentamiento global y el cambio climático para nuestra vida cotidiana. Cuando quemamos combustibles fósiles, se genera una cantidad increíble de emisiones de gases de efecto invernadero.
10 formas de ahorrar electricidad en casa
Compra bombillas fluorescentes compactas (CFL). Utilizan un 75% menos de energía que las bombillas incandescentes tradicionales. Aunque las bombillas CFL cuestan un poco más, en realidad ahorrarás dinero: la bombilla dura mucho más y no consume tanta energía.
Reduce dos o tres grados la temperatura de todos los aparatos de calefacción, aire acondicionado y agua caliente. No dejes nunca la calefacción encendida toda la noche; calienta la cama con una bolsa de agua caliente o una manta eléctrica durante unos minutos. Esto, junto con tu propio calor corporal, sábanas de franela y una doona gruesa, hará que te sientas a gusto y calentito, aunque la temperatura del aire en la habitación sea fría.
Si además pones la lavadora en ciclo rápido, reducirás la factura de la luz. Considera también la posibilidad de comprar una lavadora de carga frontal: consumen hasta un 50% menos de energía que las de carga superior. Y elige modelos con una alta calificación energética.
Las ventanas estrechas y con corrientes de aire pueden dejar escapar una gran cantidad de calor, lo que aumenta la factura de la luz en invierno. Considera la posibilidad de comprar ventanas de alto rendimiento o de doble acristalamiento. Si no puede permitírselo, asegúrese de que no haya fugas en la base de la ventana colocando un burlete en el borde. También puedes aislar las ventanas pegando plástico de burbujas en los cristales, que es sorprendentemente eficaz. No disfrutarás mucho de las vistas, pero ahorrarás dinero.
100 formas de ahorrar energía en casa
A todos nos gusta consumir electricidad, pero también es cierto que odiamos pagarla. Si le aterra pensar en la próxima factura de la luz o no entiende por qué es tan alta, Canstar Blue le ofrece algunos consejos para ahorrar energía.
Las bombillas pueden contribuir de forma sorprendente a su factura de la luz, especialmente si tiene bombillas incandescentes o halógenas antiguas. Considera la posibilidad de instalar bombillas de bajo consumo. No sólo consumen menos electricidad, sino que también duran más. Las bombillas LED suelen considerarse unas de las más eficientes, pero suelen tener un precio inicial más elevado que otros tipos de bombillas.
La calefacción y la refrigeración pueden salir caras si no eres inteligente. Para la calefacción, regula el termostato entre 18 y 22 grados: cada grado de más puede aumentar hasta un 10% los gastos de funcionamiento. En verano, regula la temperatura a 25 o 26 grados. De nuevo, cada grado por debajo de 25 puede suponer un 10% más de gasto. Además, recuerda que hay otras formas de mantenerse fresco en verano sin consumir electricidad y, a la inversa, de reducir la factura de la luz en invierno. Algunos trucos baratos para ahorrar energía son utilizar un ventilador portátil a pilas durante los meses más cálidos y ponerse un abrigo extra cuando baje el mercurio.
Formas creativas de ahorrar electricidad
Determinar la eficiencia energética de su casa es el primer paso para saber qué tiene que hacer para arreglar los lugares por donde su casa pierde energía. Puede que las ventanas necesiten calafatearse o que el equipo de calefacción y refrigeración esté anticuado y haya que cambiarlo. Puede que su casa tenga menos aislamiento del ideal.
Según el Departamento de Energía de EE.UU., la calefacción y la refrigeración representan el 56% del consumo energético de una vivienda típica, lo que las convierte en el mayor gasto de energía. Ajuste los termostatos unos grados más altos y utilice ventiladores de techo. Cada grado que baje el termostato puede aumentar el consumo de energía entre un 6 y un 8 por ciento.
La ubicación del termostato de tu casa también puede afectar a su rendimiento y eficiencia. Lea las instrucciones de instalación del fabricante para evitar “lecturas fantasma” o ciclos innecesarios de la caldera o el aire acondicionado. Coloque los termostatos lejos de la luz solar directa, corrientes de aire, puertas, claraboyas y ventanas.
Puede que un electrodoméstico tenga un precio en la tienda, pero hay otro invisible más allá de lo que cuesta comprarlo: el precio que cuesta hacerlo funcionar. Si sus electrodomésticos tienen más de 10 años, es probable que la tecnología energética para hacerlos funcionar haya mejorado mucho. Dado que los electrodomésticos representan casi el 20% del consumo energético de un hogar medio, actualizar un aparato anticuado puede tener mucho sentido desde el punto de vista energético.